Los flamencos han entrado muy motivados en el Nido, pero hoy van a necesitar algo más que motivación si quieren tener opciones de alzarse con la victoria ante los chicos de Maristas Chamberí (colegio ganador de la edición de 2017). La mejor generación de chavales a nivel baloncestístico que ha dado Maristas ya no sigue en el colegio y el legendario jugador Pablo Suárez (liga EBA, Estudiantes), quien es todo un ejemplo de humildad, juego y educación, ya no tiene edad para poder jugar con ellos la Copa.

Aún así, han presentado un equipo con jugadores interesantes. Es verdad que hay algunos que llevan un tiempo sin jugar en federación y que no están muy acostumbrados a competir juntos, pero son todos de segundo de bachillerato y, a pesar de no ser demasiado altos, tienen bastante más cuerpo que la mayoría de los del COIN, que todavía son cadetes.

La presentación de todos los que van a jugar es igual de aplaudida y espectacular que la de las chicas; a cargo de las flamencas y speakers Carla Elvira e Irene Reguilón. Jugadores y técnicos se saludan y quedan en cancha únicamente los quintetos iniciales:

Corazón Inmaculado (flamencos): Alejandro Serván, Luis Andrade, Juan Carlos Madueño, Jorge Bienvenido Sánchez y Pablo Garay.
Maristas Chamberí (tigres): Daniel Torres, Julio Montero, Alejandro Salazar, Jaime López, Daniel Mencia.

Primer cuarto: los flamencos salen como un terremoto
Tanto Leyre Arias como Sergio Padros han planteado el partido con una cerrada zona 2-3. Acertada decisión, puesto que en general no hay jugadores tan potentes como para sostener la atosigadora individual que desplegaron las tigresas. Los flamencos van a tener que ayudarse mucho más entre ellos por su falta de cuerpo.

En la previa, la victoria para COIN (Corazón Inmaculado) marcaba un 18%, mientras que para Maristas Chamberí estaba en un 83%. Pero, contra todo pronóstico, los flamencos se van a poner 8-2 en su comienzo más espectacular, en el que están aparentando ser muy superiores a su rival. El flamenco base Luis Andrade es capaz de sobrepasar a los dos jugadores de cabecera con tan sólo uno o un par de botes, y desde ahí se habilita un cómodo lanzamiento o distribuye juego.

Luego tenemos a Juan Carlos Madueño, el flamenco más fuerte físicamente, que se lo está pasando muy bien, pues entra a placer por entre los huecos que dejan los innumerables fallos que están cometiendo los tigres en su zona. Será Juan Carlos quien no tarde en lograr los primeros dos puntos para su conjunto, con una bomba que levanta por encima de cuatro tigres, y que celebra y celebran con ánimo desde la grada. El resto de los puntos llegarán de manos de Alejandro Serván, que está enchufando todos sus tiros en suspensión y no para de entrar como un afilado cuchillo al aro.

Está en un momento imparable, cuando además sabe conectar con su compañero Jorge Bienvenido, el que se ha transformado en un titán bajo aro, y que anota un 2+1 en rápido contraataque haciendo rugir al público. El Nido se lo está pasando en grande con sus chicos y, aunque parezca mentira, da la impresión de que, si COIN no gana fácil, desde luego el partido va a estar igualadísimo hasta el final.

Pero los flamencos se despistan un poco y pierden un par de balones sin finalizar ataques, balones que los tigres aprovechan con veloces contraofensivas para acabar el cuarto tan sólo 2 puntos por debajo. A pesar de todo, los de Leyre siguen arriba en el marcador y las sensaciones continúan siendo buenas.

Segundo cuarto: un giro de 180°
Turno de Maristas. Nada más comenzar estos siguientes diez minutos el sentido del partido pega un drástico cambio. Una vuelta de tuerca que por un lado podía esperarse, dado que se notaba que los tigres, por su falta de entrenamientos juntos, habían salido demasiado descolocados en su defensa en zona y sin ningún tipo de idea en ataque, lo que los llevaba a fallar ocasiones muy claras de cara a canasta.

Solucionado esto, los tigres no sólo han conseguido igualar el partido, sino que, gracias a las trabajadas canastas de Alejandro Salazar, Jaime López y Daniel Mencía, han abierto una importante brecha; una diferencia que, si los flamencos saben reaccionar bien, no debería ser tampoco ni mucho menos decisiva. De ahí el necesario tiempo muerto de Leyre para seguir aportando fuerza a sus chicos en defensa, de tal modo que éstos recuperen su solidez, y para organizar un ataque contra la, ahora sí, dura zona de los tigres.

De esta manera pinta en su pizarra una serie de puntos y rayas que le sirven para ilustrar las cargas y sobrecargas mediante inversión del balón que quiere que jueguen sus flamencos. Pero las rayas de la inversión no se van a proyectar en la cancha cuando el árbitro manda que prosiga el juego, pues los flamencos van a jugar casi todos sus ataques en 1/4 de campo, cargando únicamente una de las bandas y cambiando muy de vez en cuando y despacio el balón de lado. Así difícilmente se puede quebrar una zona, y los flamencos se estampan en su vuelo contra una muralla de tigres.

Nos vamos al descanso 10-21, en lo que supone un resultado no del todo malo para el blando y desafortunado segundo cuarto de los jugadores locales, que montan una flecha de tiro al tiempo que las cheerleaders vuelven a irrumpir en la cancha.

Tercer cuarto: la cosa sigue igual
Los dos entrenadores hacen cambios nada más comenzar esta segunda mitad:
Leyre saca de la cancha a Miguel Ángel Sacristán (autor de una espectacular bomba justo antes del descanso) y mete a Sergio del Ser, y saca también a Pablo Garay, quien no está inspirado en sus triples esta tarde (pero que no tardará en regresar a la cancha), para incluir en el cinco al recientemente incorporado al equipo flamenco Luis Jiménez, que ha puesto esparadrapo a su dorsal número 13 para salir con el 18, dado que el 13 es el ala-pívot Alberto González.

Sergio sentará a Federico Maroto para meter de nuevo al Alejandro Salazar, al que había dado un breve respiro.
Las estadísticas están siendo nefastas para los flamencos desde que dio comienzo el segundo cuarto de juego, en el que habían sido desproporcionadamente buenas. Los tigres siguen anotando, con un tal Julio Montero que se está saliendo y que anda en el hemisferio de los 21 puntos de valoración gracias en buena parte a sus numerosos rebotes.

Luego hay que hablar también de Jaime López, que está siendo el más acertado de cara al aro. Así, encauzamos la recta final con un más que tranquilizador marcador para los visitantes: 12-31.

Cuarto cuarto: los flamencos se despiden de la Copa Colegial 2019
En los tres últimos cuartos los flamingos van a anotar menos de lo que anotaron en el primero. Fueron 8 puntos en el primero y 6 en los tres siguientes. 

A pesar de ello no bajan la cabeza y llegan a este final con ganas para dejarnos una delicatesen tal como la que acaba de ejecutar Garay: ha recibido en los 90° esquina, ha intentado penetrar pero, al ser frenado por el pecho de un fuerte tigre, ha girado sobre sí mismo 360° con un saltito en el que ha despegado con el pie izquierdo y ha aterrizado sobre el derecho mientras armaba el brazo, quedando equilibrado a la pata coja con espacio para encholar desde ahí un lanzamiento limpio en la red. Un baile sobre el confín de la línea de fondo que supone el último chofff de los flamencos en esta Copa Colegial.

Suena el pitido final y el público visitante celebra con ganas su doblete. Entre los locales tampoco hay caras de desilusión, sino de haber pasado una buena tarde en su Nido, a pesar de que a todos les gustaría haber disfrutado de más viernes colegiales. Gabriel Alemany de JGBasket entrevista a Juan Carlos Madueño, Álvaro Pascual y Miguel Ángel Sacristán.
Los MVP elegidos son el flamenco Álvaro Pascual por su entregada y física defensa en la segunda mitad, y el tigre Jaime López, máximo anotador del partido con 9 puntitos.

Jugadores destacados:
#5 Jorge Bienvenido: por sus tapones, robos y 4 rebotes.
#17 Julio Montero: por sus puntos, asistencias y 12 rebotes.