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Game center
Final
Semifinal Femenino. 21 de Marzo de 2014
Colegio Estudio
Crónica: Guillermo Ortiz Fotos: Rocío Benítez - 22 de Marzo de 2014 1 comentario
En el baloncesto, ser alto, por supuesto, ayuda, pero no basta. Además, hay que tener corazón, talento y entender bien el juego. Por suerte para las tigresas de Maristas Chamberí, en su equipo hay dos jugadoras, García y Bocos, que cumplen perfectamente con todos los requisitos y que, con su trabajo incesante en el juego interior, hacen que sus compañeras brillen también, en especial Marta Domínguez, que puede pasar un poco más desapercibida pero es una alero que hace un daño tremendo al rival.
Apoyándose en ese triángulo de oro y con la brega incesante de las Arranz, González, Fajardo, Miguel, Rivas y compañía, las Tigresas de Chamberí dieron la campanada en el Colegio Estudio derrotando a las varias veces campeonas de la competición –aunque ya el año pasado cedieran el estandarte- sabiendo sobreponerse a un bache que casi les cuesta el partido. Ganar una semifinal, ante un equipo mítico y en el último cuarto, es algo como para recordar toda la vida. Ahora queda la final, el próximo viernes 28 en Veritas, contra Jesús María.
Primer cuarto. Los nervios de las semifinales
¡Qué nervios se sienten en unas semifinales! Las chicas de Colegio Estudio y de Maristas Chamberí salieron al campo algo paralizadas y con esquemas de juego muy distintos. Las visitantes, apoyadas por numerosos seguidores desplazados para la ocasión, centraron su juego en los balones a sus 'Twin Towers', a menudo incluso en situaciones poco ventajosas, abusando del balón bombeado. Las locales, por su parte, preferían el tiro exterior, fallando numerosos triples, aunque luchando siempre por el rebote. Si a eso le añadimos diez tiros libres fallados entre los dos equipos, pues el resultado de 2-8 no es ninguna sorpresa, desde luego.
Otro dato: después de la primera canasta de Rodríguez-Solano para Estudio, ninguno de los dos equipos consiguió anotar una sola canasta en juego más. Todo fueron tiros libres y faltas, un partido trabado y muy tenso.
Segundo cuarto. Estudio amenaza pero Maristas resiste
Obviamente, tanto desacierto en una semifinal no podía durar. Colegio Estudio empezó a correr más y a acertar desde fuera: un “casi triple” de Íñigo y un contraataque de Giner ponían a las locales a solo dos puntos. Por un momento, Maristas pareció un equipo perdido, había tenido la oportunidad de romper el partido pero ahora no había manera de conseguir una sola canasta. García tomó los mandos con una buena entrada que acabó en tiros libres y después, su “gemela” Bocos hizo lo propio. Giner y González intercambiaron triples de gran calidad y pusieron el marcador en 9-15, misma distancia que al principio del cuarto.
Con el tiempo casi cumplido, un gran pase de Rodríguez-Solano para Giner puso el 11-15. Pocos puntos pero mucha emoción y mucha, muchísima tela que cortar.
Tercer cuarto. La Amenaza Amarilla no se rinde nunca
A veces el peso de los títulos tensa demasiado a los equipos y a veces el orgullo del campeón les hace crecer. A Colegio Estudio le sucedió lo segundo en este tercer cuarto. Pese a las dos canastas desde debajo del aro de García y Domínguez, que medio rompían el encuentro (12-19), la Amenaza Amarilla tiró de épica y empezó a defender como si le fuera la vida en ello. Rodríguez-Solano anotó un triple, Martín anotó el 17-19 y después de un tiro libre de la omnipresente Domínguez, una canasta a tabla de De la Rosa ponía un 19-20 que causó fervor entre la grada.
El partido no tenía demasiada calidad pero emoción le sobraba: Estudio tenía la semifinal perdida y a un minuto de acabar el tercer cuarto se ponía por delante con otra canasta de De la Rosa (24-22). Solo el juego interior y las canastas de Bocos solucionaron un poco el problema y permitieron a Maristas llegar empate al principio del último cuarto. Entre ella y García consiguieron 15 puntos y 27 rebotes. ¡Casi nada!
Último cuarto. Las tigresas sacan las garras para llevarse el triunfo
Después de la remontada de Colegio Estudio y viendo los ánimos de las jugadoras y las gradas, era fácil pensar que Maristas Chamberí se vendría abajo recordando lo que pudo ser y no fue, pero en un rasgo de campeonas, las tigresas sacaron las garras y no dejaron que nadie les quitara su sueño: dos canastas de Domínguez, la jugadora AND1 del partido por parte de su equipo, unidas a cinco tiros libres fallados en el peor momento por las locales permitieron una ventaja mínima pero importante: 24-30 a falta de cuatro minutos. A partir de ahí, era cuestión de mantener, no hacer tonterías, seguir jugando con las pívots y buscar huecos para Domínguez...
Frente a eso, Estudio poco pudo hacer. De repente, se vieron diez puntos por debajo (26-36) y ningún tiempo para reaccionar. Al menos, las dos canastas finales de Alonso y Martín dejaron un marcador más acorde a lo que se había visto en el campo. Un 30-36 que lleva a Maristas Chamberí a su final soñada en la Copa Colegial.
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